Este cliente tiene una gran familia con hijos mayores de dos matrimonios diferentes. Quería organizar su sucesión para asegurar el futuro de todos, preservar la armonía de la familia y prevenir cualquier conflicto entre ellos en el futuro.
Primero le aconsejamos consolidar su patrimonio bajo un fideicomiso de administración por varias razones:
- Protección: puesto que los fondos transferidos al fideicomiso son inembargables.
- Control: los fondos están administrados por un fiduciario regulado que rinde cuentas, auditadas por un idóneo externo, al cliente.
- Tranquilidad: las voluntades del cliente, en cuanto a la transmisión de sus activos, están plasmadas en el contrato de fideicomiso para evitar un proceso de sucesión engorroso y costoso a nivel tributario.
Segundo, actuamos a nivel de la gobernanza, para asegurar la buena gestión del patrimonio. Para este fin, organizamos varias reuniones con los miembros de la familia para facilitar la comunicación y ayudarles en el establecimiento de reglas y procedimientos de decisiones entre ellos.